El maldito vaso está completamente vacío, pero él se empeña en verlo medio lleno. Soy un oso de peluche de treinta y dos años vestido con un estúpido traje de bailarina. Bebe, me dice, bebe un poco más de té, ¿unas galletitas? Y yo le sigo la corriente, qué remedio. ¿Qué otra cosa podría hacer, sentado en esta mesa diminuta con este ridículo disfraz?
noviembre 23rd, 2007 at 8:53 pm
¡Me han gustado mucho los tres cuentos!
diciembre 2nd, 2007 at 2:43 am
Habré leído este cuento unas veinte veces y cada vez me gusta más :)
diciembre 2nd, 2007 at 2:49 am
( esto… te lo puedo pedir prestado… sólo será un segundo )
diciembre 7th, 2007 at 2:37 pm
hmmm, algunos piensan que el vaso está siempre lleno (de líquido o de aire) , pero claro esque encontrar el vacío absoluto es muy complicado para los optimistas.
Aunque las galletitas me las imagino de esas de mantequilla en caja redonda metálica azul…
Salud!
diciembre 7th, 2007 at 4:38 pm
«Cocktail Bukowski»
Aquel día
Había vestido mi cuerpo
sin el alma,
Había vestido mi cuerpo
sin la alegría,
Me lavé los dientes
Y olvide la sonrisa en el lavabo,
Me lavé las manos
Y deje mi tacto en la toalla;
En ese día
Después del trabajo me fui a dormir,
Acosté mi cuerpo
Y volví a encontrar el alma.
Al día siguiente
Me vestí el alma
Y deje olvidado medio cuerpo
Y la memoria en el secador del pelo…
Y algo inolvidable que no recuerdo sucedió:
Porque hoy tengo el alma mutilada
Y ni siquiera tengo el cuerpo.
(Tiago Nené – poeta portugues – http://www.tiagonene.pt.vu)
Patricia